TEXTO: LAURA GIL FERRADÁS
FOTOGRAFÍAS: JUAN LUIS FRIEIRO
Dejamos atrás nuestra anterior entrada sobre el Modernismo Coruñés, que puedes verla clicando aquí para hablarte sobre las Galerías de la Marina, consideradas como uno de los sectores urbanos más logrados del mundo. Seguramente te sorprenda esta definición, a continuación intentaré desvelarte todo lo que esta Arquitectura de Cristal esconde.
En el libro «As Galerías da Mariña» escrito por el arquitecto Xosé Lois Martínez define el espacio que conforman la Dársena y las Galerías de la Marina como una de esas áreas que definen y simbolizan el espíritu de la ciudad de A Coruña, apodada «Balcón Atlántico» o «Ciudad de Cristal» debido al conjunto de galerías.
[…] Una fachada que, después de más de cien años, podemos contemplar desde la dársena coruñesa y que nos sugiere el intenso diálogo entre ciudad y mar.
Su construcción duró apenas quince años, desde 1869 a 1884, y en ella intervinieron diversos sectores que empezaban a producir cambios en la estructura urbana y que respondían a una nueva clase social imperante: la burguesía. En pocos años, la ciudad ofrecerá una nueva fachada al mar. Una fachada, que a día de hoy, después de más de cien años, podemos contemplar desde la dársena coruñesa y que nos sugiere el intenso diálogo entre ciudad y mar […](extracto extraído del libro»As Galerías da Mariña»)
En este artículo del año 1970, compartido en este mismo portal, se describe a las galerías como:
Arquitectos de todo el mundo se han doblegado ante esta maravilla del Paseo de la Marina. En una reciente exposición en el Museo de Arte Moderno de Nueva York ha sido considerado este alarde como unos de los sectores urbanos más logrados del mundo.
Su construcción partió de la necesidad de ampliación de la Calle Luchana (actual Riego de Agua) mediante el aumento de su sección transversal. Se buscaba la alineación con el Palacio Provincial. De esta forma, el terreno que se perdía se ganaba en la parte posterior (Avda.de la Marina)
En el siguiente plano de la época podemos ver el proyecto de alineación de las viviendas.
El diseño de los soportales lo llevará a cabo Juan de Ciórraga, tomando como referencia los soportales de La Casa de Paredes, tendrán 3.35 m de ancho y 5 m de altura.
Los soportales o “porches” de la Marina se convirtieron con el tiempo en uno de los elementos más característicos del conjunto, al presentar un severo lenguaje academicista que contrasta con la espontánea variedad de los módulos de las galerías.
Actualmente, se han unificado los toldos con una solución discreta y sencilla de manera que el protagonista sea el soportal y no el toldo. En la siguiente imagen se puede apreciar el acierto de la nueva solución.
LAS GALERÍAS DE LA MARINA, UN GRAN TRASATLÁNTICO
Pero… ¿de dónde procede esta fórmula de acristalar la fachada para atesorar el sol de invierno y benificiarse de sus dos inmediatos efectos, la luz y el calor?
Cartel de Álvaro Cebreiro (1923)
La ciudad de A Coruña, con un clima suave, presenta una de las mejores oscilaciones térmicas de España de tan solo 6º, una temperatura media anual de 15ºC, y un invierno suave con cero días de helada; sus más de 2000 horas de luz al año, unas precipitaciones moderadas de 1000ml/año, son los datos climáticos de una ciudad donde el calor y el frío nunca son excesivos; un clima que permitió la extensión de la fachada al exterior mediante el Balcón. Posteriormente llegarían los Miradores o Costureros, pequeños balcones acristalados que protegían de la lluvia y el viento tan solo con un hueco rasgado en el muro.
La Galería resultaba de acristalar un balcón corrido, normalmente en plantas segunda y tercera, de modo que el espacio resultante abría a dos, tres o más huecos en el muro.
El el libro «La Galería en Galicia» escrito por Joaquín Fernández Madrid, el arquitecto nos desvela el secreto de la galería:
El acierto arquitectónico de la galería consiste en la aparición de un espacio híbrido interior-exterior; en la riqueza espacial que supone la superposición de dos pieles: una sólida y otra ligera, una pétrea y otra acristalada. La esencia de la galería viene dada por esas dos características, si falla alguna de ellas ha dejado de existir propiamente la galería
LA GALERÍA, UN INVERNADERO HUMANO
Su descubrimiento trasladó a la edificación el denominado “efecto invernadero” planteando las bases de la Arquitectura Solar Pasiva de hoy en día.
¿Cómo funciona? la galería funciona como un enorme colector solar que capta la energía de baja frecuencia y la almacena en el muro al que está adosada; durante la noche impide que el muro se enfríe rápidamente permitiendo que éste ceda parte de calor a las estancias interiores.
La Galería nace con un fin, cerrar un balcón existente para protegerse del agua y del viento. Su doble piel proporciona beneficiosos efectos térmicos cuando está correctamente orientada. Su descubrimiento trasladó a la edificación el denominado “efecto invernadero” planteando las bases de la Arquitectura Solar Pasiva de hoy en día.
Es así como conseguimos un auténtico invernadero humano dentro de casa, pero con un confort térmico cómodo para el interior del hogar.
Ahora que ya sabemos sus virtudes ¿quién no se anima a vivir en un edificio con galería? Además de calidez interior, la galería presenta múltiples utilidades, tanto espaciales como sociales. En la mayoría de casos, el estrecho espacio interior de la misma se utiliza como prolongación del salón; como corredor de acceso a otros espacios, lugar de flores y plantas, cuarto de juegos para los niños o lugar donde las abuelas laboriosas, al tiempo que calcetan, pueden observar la calles. En las siguientes fotografías podemos apreciar sus diversas funciones.
Según escribe el arquitecto Xosé Lois Martínez en su libro ‘As Galerías da Mariña’, los requisitos a cumplir para la construcción de las Galerías de la Marina respondería a tres premisas previas: prohibición de colocarlas sobre repisas de madera, prohibición de su construcción en la planta primera y prohibición de colocar el wc en las galerías que diesen a calles públicas. Posteriormente se permitiría la construcción de la galería en las fachadas posteriores (Avda. de la Marina) en planta primera, siempre que el vuelo de sus repisas no excediese la dimensión de 60cm.
Por otra parte, le daré importancia a uno de los elementos que definía a las galerías tradicionales, LA VENTANA DE GUILLOTINA. En la galería, este tipo de ventana encuentra su mayor utilidad, ya que, dado el reducido espacio interior, no procede que las hojas abran hacia dentro, ni tampoco hacia el exterior, que obligaría a usar herrajes especiales para retener las hojas de vidrio ante las ráfagas de viento. Tradicionalmente se realizaban en madera debido a las excelentes propiedades físicas y mecánicas del material. Junto al vidrio, ambos materiales componían la totalidad de la galería gallega tradicional.
Actualmente, muchas de estas ventanas son sustituidas por ventanas de aluminio con aperturas oscilantes que lamentablemente rompen y estropean la composición de muchas de estas fachadas de cristal.
Muchos de los edifcios que formaban el Cantón Coruñés fueron derruidos y sustituidos por los edificios actuales. En las siguientes fotografías se pueden apreciar algunos de los edificios que nos «han abandonado»
Actualmente Marina y Parrote presentan el aspecto mostrado en las siguientes fotografías.
Ahora seguro que no nos resulta tan estraño el alarde de que Las Galerías de la Marina conformen uno de los sectores urbanos más logrados del mundo. Desde condecórate deseamos que lo sigan siendo.
Hemos llegado al fin de este recorrido por las Galerías de la Marina. Deseo que hayas disfrutado con su lectura. Como siempre, nos encantará conocer tu opinión.
Me despido desde una estupenda y luminosa galería coruñesa. Espero seguir contándote nuevos decrubrimientos.
¡Hasta pronto!
Bibliografía
XOSÉ LOIS MARTÍNEZ SUÁREZ «As Galerías da Mariña»
XOSÉ de CASTRO ARINES «O Libro das Galerías Galegas» A Coruña (1869-1884)
JOAQUÍN FERNÁNDEZ MADRID «Arquitectura del Agua»,» La Galería en Galicia»
Hola…las galerías de la Marina son anteriores a 1869, de hecho la casa Batanero ya existe en 1860…en esa época ya había 2 o 3 que convivieron con las viejas murallas del Derribo y el Malvecin…se puede comprobar gracias a la fotografía más antigua de la ciudad, tomada en 1862 y expuesta en el Museo de Bellas Artes (si mal no recuerdo)…ahí ya aparecen las galerías… un saludo 😉
Muchas gracias por la interesante aportación. Un saludo!
Muy interesante este artículo. Yo he vivido muchos años en San Andrés 71, que es una preciosa casa modernista. Y allí, en la galería del 4º piso, cuando era aún adolescente, tenía un modesto laboratorio de química y biología. Sin duda era un sitio perfecto para eso. Sobraba la luz, podía aislarme cerrando las «contrapuertas», y hasta podía ventilarlo si algún experimento salía mal…..Sin duda marcó mi futuro profesional.
Nunca había pensado en esa adecuación de las ventanas de guillotina. Muy acertada. Y lo cierto es que nunca las he visto en ningún otro sitio.
Enhorabuena de nuevo!
Buenas noches, Luis.
Nos ha encantado el relato de tu experiencia. Es todo un privilegio vivir en un espacio con esas características. Como bien dices, los lugares en los que vivimos marcan en cierta manera el camino que seguimos en la vida. Muchísimas gracias por compartir con nosotros tu vivencia. Un saludo, Laura.