Hace unos días visitamos a nuestros amigos Sergio y Leila con la excusa de fotografiar en su casa nuestra colección de cerámica alemana de la década de los 60.
Queríamos retratar los jarrones en un ambiente contemporáneo y agradable para apreciar el efecto que producía el medio siglo de diferencia.
Comprobamos que el resultado era mejor de lo esperado; la cerámica West Germany es totalmente atemporal, armoniza con todo y aporta color y calidez.
Fuimos más allá con el experimento y utilizamos a su mascota Gaia. Es una preciosa gata persa que interactuó con el más grande de los jarrones, el único de nuestra colección a prueba de traviesas mascotas. El considerable tamaño de la pieza la intimidaba en ocasiones.
Aprovechamos para realizar un vídeo donde aparece la familia que habita la casa, incluida Gaia.
Queremos agradecer a Sergio y a Leila el haber sido unos excelentes anfitriones. Estamos deseando realizar nuevos experimentos en su precioso «laboratorio doméstico».